22 de agosto de 2012

7 cosas a tener en cuenta a la hora de comprar unos escarpines de buceo

Hará cosa de un mes o así tuve que cambiar de escarpines porque los míos estaban ya definitivamente para el arrastre (ahorrativa que es una) y había pensado escribir un post sobre cosas que yo tengo en cuenta a la hora de elegir unos escarpines. Si ya tenéis los vuestros y habéis comprado varios seguramente este post no servirá más que para cotejar opiniones pero si son vuestros primeros escarpines tal vez os pueda interesar :-)


En primer lugar, es necesario saber el tipo de aletas que usáis, si son aletas calzantes posiblemente sea mejor utilizar calcetín que escarpín y dado que, por el momento, yo no utilizo aletas calzantes voy a centrarme en los escarpines para aletas regulables.

Yo parto de la base de que le pido a mi equipo durabilidad y resistencia dado que no soy muy amiga de comprar cosas poco duraderas tanto por ahorro económico (a veces merece la pena pagar un poco más) como por ahorro medioambiental reduciendo residuos.

Las características principales que debe cumplir mi escarpín son:


  1. Una buena suela: me gusta que tengan una suela resistente así si tengo que hacer inmersiones desde playa o necesito realizar algún recorrido hasta el puerto puedo ir directamente con los escarpines sin que mis pies sufran ningún inconveniente.
  2. Puntera delantera reforzada: la puntera delantera reforzada es importante porque con el desgaste a base de apretar aletas, y por el propio movimiento del pie dentro del escarpín acaban apareciendo patatas en el escarpín y el dedo gordo del pie tiende a salir ;-) Un buen refuerzo hará que esta zona esté más reforzada.
  3. Talonera reforzada: para mí es importante el refuerzo de la talonera para evitar que a base de apretar la cinta regulable de las aletas se produzcan roturas en la parte trasera del escarpín.
  4. En este caso, los he adquirido con una muesca posterior de goma para sujetar mejor la cinta de la aleta y evitar que caiga hacia abajo y tener que ir recolocándola durante el descenso en la inmersión.
  5. La talla. Es importante que sean de tu talla. Si te quedan grandes a base de ajustar las aletas (ver puntos 3 y 4) puedes estropear antes el escarpín por lo que sufre el material y si te quedan muy pequeños puedes estropearlos y además, si llevas el pie demasiado encogido buceando puedes sufrir algún calambre (poco agradable).
  6. El grosor del neopreno. Esto va a elección en función de lo friolero que sea el usuario. Yo como soy friolera los cogí de 5mm pero esto es un criterio muy personal.
  7. Elasticidad del neopreno y facilidad de calzado. Me gusta que los escarpines sean fáciles de poner y que no tenga que sudar la gota gorda para colocarlos así que con cremallera lateral es lo más fácil. Entra un poco más de agua que sin cremallera pero cada vez son más eficaces a la hora de mantener el agua fuera.


Así que viendo todo esto, adquirí los escarpines de la fotografía de la casa Mares. El resultado de momento es muy bueno aunque el primer día tuve que adaptarme a un escarpín más rígido. Sufrí unas pequeñas agujetas tras la inmersión debido al cambio pero ahora, una vez adaptada, estoy más que contenta con ellos. Habrá que ver lo que duran aunque parece ser que me van a acompañar mucho tiempo.

¿Coincides conmigo en lo que debe tener un escarpín? ¿Me he dejado algo en el tintero?

Nos vemos en el azul ^_^

No hay comentarios:

Publicar un comentario