Las consecuencias de los recortes en las reservas marinas

El pasado sábado leí con tristeza pero no con sorpresa, la noticia que publicaba Miguel Ángel Ruiz (@maruizlv) sobre la reserva de Cabo de Palos - Islas Hormigas (Murcia): los furtivos saquean los meros de Islas Hormigas, con un descenso de la población de meros de hasta el 70%. Este descenso es una barbaridad pues como ya comentaba en este artículo concreto sobre el mero la recuperación de esta especie es muy lenta y, por tanto, una eliminación de meros tan brutal como esta no dejará de tener consecuencias futuras: para los centros de buceo, para los pescadores profesionales de zonas adyacentes, para los que cumplen la ley... una barbaridad.

El pasado año fue un año muy duro para todas las reservas marinas,
en especial, para la isla de Tabarca y que ya conté en este post: "Tabarca no tendrá vigilancia 24 horas" donde se recortó el presupuesto al máximo, un 80%.  En este caso el recorte venía del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que era el responsable de correr con la vigilancia, ahora, Tabarca cuenta con mayor vigilancia pues se ha recuperado parte del presupuesto y eso es una alegría digna de mencionar (no todo va a ser malo) y se cubrirán las 24 horas de vigilancia.

Sin embargo, en las reservas a cargo de las Comunidades Autónomas como el caso de Islas Hormigas, Serra Gelada en la Comunidad Valencia, Cabo de Gata en Andalucía  por poner unos ejemplos, es prácticamente inexistente, han quedado huérfanas. Los recortes se han cebado con ellas y con el medio ambiente en general, veremos que futuro nos espera. Sin una pesca controlada, cuantificada,... ¿cómo se va a gestionar bien?

Podríamos pensar que porque se pesque en el mar no pasa nada, que total meros va a haber siempre, sin embargo, como ya conté en esta entrada de "Pezqueñines, no gracias, pero abuelos tampoco" la biología de las especies, su modo de vida, su reproducción es tan variado que es necesario conocer en profundidad cada una de ellas para ver cómo les afectan. Y, además, de conocerla, actuar en consecuencia para protegerlas.

Pescando sin control en las reservas marinas perdemos el gran efecto potenciador de las mismas, "El efecto reserva" que es importantísimo para que podamos mantener nuestros recursos pesqueros y no sólo eso, sino mover una economía basada en el buceo responsable y sostenible que puede ser un motor muy importante para todas las regiones y no (permitidme el desahogo) el enladrillar toda la costa a base de una nueva ley que desprotege el litoral y que todavía tienen la desfachatez de decir que la protege, y añado yo, que protege a los que quieren dar el pelotazo urbanístico.

Hay una acción en Change.org para recoger firmas en busca del restablecimiento de la vigilancia en la reserva de Islas Hormigas a la que os invito a sumaros: https://www.change.org/es/peticiones/do%C3%B1a-carmen-teodora-morales-cuenca-m%C3%A1s-vigilancia-en-la-reserva-marina-de-cabo-de-palos-islas-hormigas para ver si podemos parar algo aunque parece que ya llegamos tarde.

Lo más triste de la situación es que estamos en manos de gestores que priorizan el pan para hoy el hambre para mañana en base a sus 4 años de mandato. :-(

Muy hasta el gorro hoy.